En la mayoría de los manuales y libros de texto, se estudian paralelamente los “fascismos y comunismos”. Si bien no los equiparan directamente, si que los arrojan todos en el mismo saco, frente al triunfante capitalismo.
Lo que quizás se les olvida mencionar es que todos los fascismos eran formas muy agresivas de un capitalismo feroz. Las empresas alemanas financiaron al partido nacionalsocialista desde sus comienzos. Destacan, entre muchos otros, las famosas industrias Krupp, Hjalmar Schacht, presidente del Reichsbank, Emst Von Borsig, Hugo Stinnes, etc.